Passivhaus
Vivir mejor con menos energía
Estándar de construcción de eficiencia energética y de carácter prestacional para cualquier tipología de edificio.
La demanda de energía es tan baja que permite prescindir de un sistema de climatización convencional.
Ya es posible vivir mejor consumiendo menos energía.
¿EN QUÉ CONSISTE EL ESTÁNDAR PASSIVHAUS?
El estándar Passivhaus surge en Alemania, en los años noventa y está considerado como uno de los más exigentes respecto a eficiencia energética en el sector de la construcción.
Combina un elevado nivel de confort con un consumo de energía muy bajo y puede ser complementario a otras certificaciones medioambientales como GBCE o BREEAM.
El estándar está fundamentado en un principio pasivo, es decir, el edificio se concibe como un termo en el que no se pierde la energía y, por salubridad, se le dota de un sistema de renovación de aire que mantiene esta energía en su interior.
Para conseguir esto se trabajan cinco principios: cuatro de ellos relacionados con la envolvente del edificio y otro con la ventilación.
El aislamiento térmico busca un equilibrio entre la inversión y el ahorro energético. Es fundamental conseguir la continuidad de este aislamiento y para ello se trabajan los encuentros comprometidos, evitando así los puentes térmicos. Las carpinterías y vidrios que se eligen son de altas prestaciones.También se trabaja la hermeticidad para evitar entradas de aire no deseadas, sobre todo en días de viento. Y por último, una vez se ha trabajado la envolvente se instala un sistema de ventilación para garantizar la salubridad.
En la fase de diseño se utiliza un programa elaborado por el Passivhaus Institut llamado PHPP (“Passive House Planning Package”). El edificio se modeliza en el software y se trabaja hasta alcanzar el equilibrio optimo entre la inversión y el ahorro energético obtenido. Permite tomar decisiones energéticas sobre el edificio y tener visibilidad en todo momento del impacto que cualquier decisión tiene en la demanda global de energía.
LOS 5 PRINCIPIOS Y CRITERIOS DE LA ARQUITECTURA BIOCLIMÁTICA
Diseño bioclimático
Elaboramos una propuesta teniendo en cuenta los siguientes aspectos: situación, geografía, clima, orientación, soleamiento, protección solar, vientos dominantes, vistas, refrigeración nocturna, inercia térmica, etc. La estrategia correcta permite optimizar la inversión en las medidas pasivas del edificio.
Alto aislamiento térmico
Estudiamos el tipo y espesor de aislamiento idóneo según el clima, con el fin de minimizar las pérdidas o ganancias de calor a través de los muros, es decir, evitamos que el calor se escape en invierno y que no entre en verano. Este aislamiento térmico debe ser continuo en todo el perímetro del edificio, fachadas, suelo y cubierta.
Eliminación de puentes térmicos
Un puente térmico es un debilitamiento en el aislamiento del edificio y son habituales en la mayoría de las construcciones. Se pueden hacer visibles con cámaras termográficas y se suelen producir en ventanas, terrazas, balcones, estructura del edificio, etc. Estos debilitamientos son los responsables de gran parte de las pérdidas energéticas de nuestros edificios.
Carpinterías y vidrios de altas prestaciones
El tipo de marco de ventana es elegido en función del clima y el tipo de vidrio según su orientación teniendo en cuenta la cantidad de radiación solar directa que recibe, buscando el máximo aporte de ganancias solares en invierno y el mínimo en verano.
Hermeticidad
Estamos acostumbrados a convivir con infiltraciones de aire no deseadas en los edificios. En nuestros edificios trabajamos los encuentros entre paramentos, carpinterías, pasos de instalaciones, etc. para garantizar la hermeticidad al aire.
Recuperador de calor
Una vez que el edificio está perfectamente aislado y hermético al paso del aire, necesitamos ventilarlo. Optamos por una ventilación mecánica de doble flujo con recuperador de calor.
¿CUÁLES SON LAS PRINCIPALES VENTAJAS DE LA CONSTRUCCIÓN DE CASAS PASIVAS?
Confort térmico, acústico y calidad del aire interior
Confort térmico, gracias a un alto aislamiento térmico, buenos vidrios y carpinterías, ausencia de puentes térmicos y cuidada hermeticidad. El resultado es una temperatura constante y homogénea en todas las estancias.
Confort acústico, gracias a un trabajo meticuloso y preciso en la ejecución de la envolvente para alcanzar el máximo confort térmico, teniendo como resultado un edifico bien aislado acústicamente del exterior.
Calidad del aire interior, gracias a una ventilación mecánica continua de doble flujo con recuperador de calor, se elimina la concentración de CO₂ y COV (compuestos orgánicos volátiles) así como otros aerosoles generados en el interior de las edificaciones.
Salud y bienestar
Los filtros del recuperador de calor, ubicados en los ubicados en los conductos de admisión de aire, impiden la entrada de partículas, polvo y polen al interior de la edificación.
La ventilación continua elimina la concentración de CO₂ y COV (compuestos orgánicos volátiles) generados en el interior de las edificaciones y que se pueden traducir en cansancio, dolores de cabeza, irritación en ojos, nariz y garganta, sequedad del sistema respiratorio…
Eficiencia, sostenibilidad y rentabilidad
El estándar Passivhaus es eficiente por el bajo consumo energético y, en consecuencia, económico.
Sostenible porque el CO2 que deja de emitir una casa pasiva de 350 m2 en un año equivale al CO2 que absorben 100 árboles en el mismo periodo de tiempo.
Y por último la rentabilidad, ya que un edificio construido bajo el estándar Passivhaus tiene un sobrecoste de construcción entre un 2 y un 5%, que se amortiza entre los 5 y 10 años, debido al ahorro energético y de mantenimiento.
¿CUÁNTO CUESTA UNA PASSIVHAUS?
El coste de un edificio va más allá del coste de construcción; además, es necesario añadir el coste de mantenimiento y el coste energético a lo largo de toda su vida útil.
Y es entendiendo el coste del edificio de este modo cuando una vivienda Passivhaus es más económica que una vivienda que cumpla el Código Técnico de la Edificación, ya que la inversión inicial que marca esta diferencia se amortiza en los primeros años de vida.
Los ratios difieren en función de la superficie y de las calidades que se utilicen pero podríamos considerar una horquilla de entre un 2 y un 5% ya que el hecho de tener que cumplir la normativa en vigor desde 2019, obliga a la aplicación de los 5 principios del estándar Passivhaus.
El siguiente paso consistiría en garantizar la correcta modelización del PHPP, la atención a los detalles constructivos que la normativa no tiene en cuenta, la puesta en obra y el control de calidad en cuanto a ensayos y documentación.
Además es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos de suma importancia.
PREGUNTAS FRECUENTES
Depende del uso que se le dé al edificio pero podemos estar hablando de un ahorro de alrededor de un 90% con respecto de un edificio construido antes del año 2000. Con respecto a un edificio posterior como la normativa en materia energética ha ido haciéndose más exigente en los últimos años, dependerá del momento en el que se obtuvo la licencia. Con respecto a un edificio de nueva construcción la diferencia teórica es inferior, sin embargo la realidad en muchos casos difiere de los resultados teóricos ya que la normativa actual no establece mecanismos para su comprobación.
Por supuesto que en un edificio Passivhaus se pueden abrir las ventanas. No solo es que se puedan, es que se deben abrir. La diferencia es que en un edificio Passivhaus no es necesario hacerlo para ventilar puesto que la ventilación mecánica lo realiza de forma continua, y además, recuperando en un alto porcentaje la temperatura interior del edificio. La apertura de ventanas en una Passivhaus suele jugar un papel importante para refrigerar el edificio cuando durante el día se ha ido cargando de calor.
No es obligatorio pero es muy recomendable ya que la certificación es la única garantía de que el edificio cumple con las prestaciones para las cuales se ha diseñado.
Esto no es cierto. Los edificios Passivhaus, aunque tienen una demanda de energía muy baja, es necesario dotarlos de sistemas de calefacción o refrigeración. Lo que ocurre que estas instalaciones están dimensionados para muy poca necesidad de energía y prácticamente se podría climatizar a través del aire de ventilación.
No es cierto. Los edificios Passivhaus se pueden construir con cualquier sistema estructural y de cerramiento. La madera es utilizada en alguna parte de las viviendas unifamiliares puesto que es un material con una huella de carbono inferior al acero, hormigón y otros sistemas estructurales.
Este es un tema que hay que prestarle especial atención ya que existe esta posibilidad si no prevemos y utilizamos la protección solar. Un edificio Passivhaus está pensado para captar la energía del sol durante el invierno con el fin de reducir la demanda de calefacción y se debe pensar en la protección solar para no tener necesidad o minimizar (según en qué clima) la refrigeración. Cuando en las simulación energética se detecta necesidad de refrigeración es necesario dotar al edificio de una instalación que garantice el confort interior en verano. Si tienes alguna duda puedes llamarnos y te la resolvemos.
¿QUÉ ES LA CERTIFICACIÓN PASSIVHAUS?
La certificación Passivhaus es el reconocimiento y la única garantía de que se ha aplicado una metodología integral en diseño y construcción y que el edificio cumple con las prestaciones que establece el estándar Passivhaus. Estas prestaciones están orientadas a alcanzar el máximo confort con la mínima energía. Esta certificación la otorga el Passivhaus Institut o un certificador homologado y para conseguirla es necesario trabajar de forma simultánea y coordinada los siguientes principios básicos:
- Alto nivel de aislamiento térmico
- Eliminación de los puentes térmicos
- Carpintería y vidrios de altas prestaciones
- Hermeticidad al aire
- Ventilación mecánica con recuperador de calor.
Sin embargo, no todos los edificios en los que se trabaja estos principios son edificios Passivhaus. Es decir, los cinco principios son los ingredientes fundamentales que forman parte de la receta.
Un edificio construido con criterios Passivhaus no es un edificio Passivhaus.
EDIFICIOS CERTIFICADOS PROYECTADOS Y CONSTRUIDOS POR EMMEPOLIS NOVECENTO
Emmepolis Novecento es una empresa pionera en el diseño de Edificios Passivhaus. En 2014 Certifica el primer edificio de oficinas passivhaus en España y la primera vivienda unifamiliar en Madrid. Después llegaron edificios de vivienda colectiva, centros de día, obra nueva, rehabilitación, etc. Una variedad tipológica certificada passivhaus que pone en valor la capacidad de Emmepolis Novecento de afrontar nuevos retos y llevarlos a cabo con éxito.
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