Reforma integral en vivienda con un programa funcional de gran salón, cocina abierta, tres dormitorios principales y diversas estancias de servicio. La distribución de los distintos espacios se produce en torno a un gran patio de manzana interior, resultando una de las premisas fundamentales del proyecto la circulación a su alrededor, potenciando la luz y la sensación de vivienda abierta y recogida en torno a sus ventanales. De esta manera conseguimos que no se generen pasillos y que por tanto la sensación de amplitud surja de forma natural.
Interiormente se ha creado un espacio único, especial, casi palaciego. Para ello se han utilizado materiales como un pavimento de madera al estilo Versalles, mediante cuadrados de 90x90cm de roble tratado, envejecido de forma artificial; en el vestíbulo pavimento de mármol envejecido a modo damero; en paredes, enlucidos maestreados de yeso, con zonas de boaserie de madera y baquetones de escayola o madera. La iluminación juega un papel fundamental logrando un espacio íntimo y acogedor.
